El golf es uno de los pocos deportes destinados a todos los públicos. Ya seas niño o adulto, estés en buena forma física o no, esta disciplina te ofrece la oportunidad de disfrutar de un rato agradable mientras realizas ejercicio.

¿Cómo es la iniciación al golf de los más pequeños? Cada campo de golf ofrece sus propios entrenamientos, si bien es cierto que existen diversas lecciones básicas de golf para que los niños aprendan los conceptos más básicos, desde dirigir la bola hasta potenciar su concentración.

Mediante estas rutinas iniciales, los jóvenes aprenderán las nociones básicas de este deporte y podrán seguir instruyéndose para convertirse en grandes jugadores de golf en un futuro próximo.

Por norma general, los más pequeños comienzan su instrucción a los seis años. Durante esa época se recomienda que el niño o niña reciba clases junto a otros niños de su misma edad. Aprender junto a otros alumnos les ayudará a estar más motivados y podrán desarrollar de la mejor manera aptitudes como la concentración o la precisión en el golpeo.

Clases de golf para manejar el palo

Entrenar a niños de tan corta edad no es nada sencillo. Para enseñar a alumnos tan pequeños es necesaria mucha paciencia, constancia y técnica. Si los pequeños entrenan solos pueden llegar a aburrirse. Por lo tanto, hacerlo acompañados con gente de su edad será mejor, tanto para el instructor como para los alumnos, quienes aprenderán todavía más y sacarán el mayor provecho a sus lecciones.

Una de las nociones básicas del golf es aprender a dirigir la bola. El instructor debe conseguir que el niño sea capaz de mandarla por donde realmente quiere. Para que aprendan a hacerlo se recomienda trazar una línea desde una distancia corta hacia el hoyo y que practiquen e intenten que la bola se salga el menor tiempo posible de la línea.

Por muy sencillo que parezca este ejercicio, con él se conseguirá que los niños aprendan a manejar el palo de golf. No obstante, cuanta más edad tengan, mayor tendrá que ser la línea trazada hacia el hoyo, para ofrecer un punto superior de dificultad al ejercicio.

Clases de golf para potenciar la concentración

Otro de los factores imprescindibles que tendrás que tener en cuenta a la hora de formar a un nuevo alumno es la concentración. La práctica de Pilates ayudará a los niños a potenciar su concentración mental. Por lo tanto, una vez realizadas las clases de golf relacionadas con el dominio del palo, se recomienda practicar esta disciplina de relajación.

En este sentido, resulta muy adecuada la realización de ejercicios de respiración para aprender a canalizar la energía. También podrás ofrecerles una bola de Pilates para que, tumbados, se la lleven con las piernas hacia la zona de la barriga. Así conseguirán mejorar su condición física en las piernas con una musculatura más desarrollada.

En caso de que tus alumnos sean capaces de potenciar su concentración y, al mismo tiempo, manejar el palo y dirigir la bola, podrán pasar a un nivel de entrenamiento más avanzado. No olvides que cada persona es un mundo y no todos evolucionamos de la misma manera. Cada uno tenemos nuestro propio ritmo de aprendizaje.

Mediante estos entrenamientos conseguirás que las condiciones físicas de los más pequeños de la casa mejoren, y comprobarás cómo querrán seguir jugando al golf después de terminar su entrenamiento básico diario. Si estás pensando en adentrar a tus hijos en la práctica del golf, no dudes en hacerlo, es un deporte saludable y del que, sobre todo, disfrutarán mucho.